Para entender la disfunción temporomandibular

La ATM (articulación temporomandibular) es aquella donde la mandíbula (maxilar inferior) articula con el temporal, un hueso del cráneo. Se mueve al masticar, pero también se mueve cada vez que Ud. habla y cada vez que deglute (más o menos cada dos minutos). Por lo tanto, es una de las articulaciones del cuerpo que más trabajo realiza.

Ud. puede localizar la ATM y sentir cómo trabaja, haciendo presión con la punta de los dedos inmediatamente delante de las orejas, mientras abre y cierra la boca.

Identificado por primera vez en 1934 por el eminente otorrinolaringólogo Dr. J. B. Costen, la DTM ocurre cuando estas articulaciones están sujetas a una presión excesiva debido a una mala alineación o al malfuncionamiento de los dientes, los músculos o la mandíbula.

Costen fue el pionero que alertó a los profesionales médicos y dentistas sobre esta condición. Demonstró que el dolor de oídos, de cabeza y del cuello se podían eliminar corrigiendo la mordida incorrecta y aliviando el exceso de presión sobre la ATM “abriendo la mordida” con aparatos intraorales.

De acuerdo a estudios realizados por la American Dental Association (Asociación Dental de Norteamérica), aproximadamente 75 millones de personas en los Estados Unidos sufren algún trastorno de la ATM. Sin embargo, aún falta por diagnosticar en muchos pacientes que han sufrido años de cefaleas crónicas, dolor del cuello, de los oídos y otros.

La disfunción de ATM ocasiona dolores generalizados y variables que van de malestar no muy severo y constante a dolor intenso, intermitente, en las regiones afectadas.

Las cefaleas, otalgias, dolores faciales y cervicales son síntomas comunes. A menudo hay dificultad para abrir la boca y chasquidos a nivel de las articulaciones. La DTM no se siente tanto en la articulación misma como en los músculos afectados.

Es comparable a tener una piedra en el zapato; no sólo duele el pie sino también los tobillos, las piernas y la espalda cuando el cuerpo trata de no apoyarse en el sitio irritado. El Boletín de la Asociación Médica Norteamericana describe la disfunción de la ATM como el “gran impostor” debido a que imita a muchas enfermedades diferentes y presenta una gran variedad de síntomas.

La disfunción de la ATM puede deberse a una variedad de fuerzas que sobrecargan las articulaciones temporomandibulares.

DIENTES malalineados, pérdida de dientes y mal trabajo dental, incluyendo el de ortodoncia.

MÚSCULOS, malos hábitos de deglución desde la infancia que empujan
la mandíbula hacia atrás. Hábitos miofuncionales tales como el bruxismo, apretar los dientes y la respiración bucal. La tensión que resulta de apretar y rechinar los dientes es también una causa común ya que sobrecarga las ATM y los músculos.

MANDÍBULA, desarrollo mandibular incorrecto que causa asimetría de
los maxilares. Traumatismo tal como una caída o un accidente automovilístico (muy común en lesiones por latigazo cervical). Enfermedades degenerativas tales como la osteoartritis.